No sé. No sé ni por donde empezar… Cuando me pedisteis que os fuera contando primeras impresiones, pensé que sería mucho mas fácil, la verdad.
Jueves.
Llegue con retraso al aeropuerto de Lyon, después de una larga escala en Barcelona, de ahí en autobús hasta Grenoble,una horita de trayecto, que agradecí infinitamente, pues estaba agotada, allí estaban esperándome la familia al completo. La familia un encanto… muy atentos y cariñosos -¡Eso sí! ¡No les entiendo ni pa-pa! (Empezare las clases de Francés el viernes que viene)-. De la Maison… podréis opinar vosotras mismas en las fotos en cuanto las suba a Facebook… pero es muy grande y con un acentuado toque señorial, es de esas casas que podría salir en cualquier revista.
En lo que se refiere a mi cuarto… calculo que es unas cuatro veces mi cuarto en Madrid. De una de las paredes cuelga el retrato de algún antecesor de la familia. No esta firmado, ni tiene los datos del retratado en la típica placa dorada. Justo en frente, otro retrato, esta vez de una mujer. Una mujer sonriente. De nuevo sin placa y aunque éste es de otra época -me lo dice el pomposo traje de la dama retratada- tampoco tiene firma alguna... haré la investigaciones debidas y os pondré al corriente. Algo más llama la atención en mi nuevo cuarto, tres velas dyptique tamaño pequeño -¡Mis favoritas!- colocadas intenionadamente en una mesilla de noche improvisada. Improvisada porque no conjunta con el resto de los muebles. Diría que es de Ikea. Junto a las velas, unas cerillas. Cerillas normales y corrientes, aunque francesas -Allumettes Francaises-.
La cena de ese dia ¡espectacular! Una quiche lorraine riquísima, ¡y como no! tabla de quesos siempre antes del postre. Todo ello acompañado de un vino rosado, por supuesto Francés.¡Todo muy Francés!
Viernes.
Yo lo describiría como un día… raro… deshacer maletas, conocer un poco más a la familia, dar una vuelta por Grenoble, interiorizar nuevas sensaciones...
De Grenoble diría que es una ciudad… poco convencional, con edificios antiguos lo que le da un aire muy parisino -aunque en un tamaño mini por supuesto- a la vez, al estar tan cerca de Italia, los colores de los edificios recuerdan a cualquier ciudad italiana. Esta llena de gente joven, ¡cosa que me encanta! (¡Que ganitas de conocer Españoles!) Pero lo que me impacta verdaderamente, es el paisaje que rodea a Grenoble…¡Los Alpes en estado puro! Esta rodeada de inmensas montañas cubiertas de nieve... Vercors, la Chamrousse (¡Con pistas de esqui a tan solo 30 min del centro! Quiero esquiar yaaaaaaaaaaa) , La Chartreuse, Les Écrins…Ya me ha dicho la madre de la familia, que esta semana iremos a comprar unos esquís.
Algo que me ha sorprendido muchísimo de esta ciudad, es lo gris que es la luz… quizás es solo impresión mía… pero como el sol de España... Lo que si que no puedo dejar de comentar ¡es el Frío que hace! (También es normal… en plenos Alpes… no se que temperaturas me esperaba yo...) La gente de por aquí… va como si tal cosa… con chaquetitas de primavera -moníííísimasssss- pero que no abrigan nada… yo mientras tanto soy una cebolla. Una cebolla Española -¡Eso sí!-.
¡Oficialmente soy una Madrileña por el Mundo! ¡Ya os seguiré contando primeras aventuras e iré subiendo fotos esta semana! Os echo de menosss niñasss
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