Oui, Oui! Se puede saber.
Martes. Reconozco que me ha costado bastante levantarme… Vaya, que me he quedado dormida y he tenido que ducharme y llevarme algo a la boca a toda prisa, para poder cumplir con mi horario de estudio. Aunque el tema de Derecho dejémoslo mejor para otro día, pero ya me conocéis… ¡AGOBIADA estoy! -¡Qué digo!- ¡AGOBIADIIISIIIMAAAA!
He comido con los niños y con la nunú (como llaman aquí a la que cuida a los niños, que en este caso es una señora mayor “apasionante” –con sus mas y sus menos por supuesto- pero a la que sí o sí tengo que dedicar una página completa de este diario virtual alguna vez… ¡Que mujer!), hoy hemos tenido una invitada (Rocio, Colombiana, ¡Por lo que habla Español!), antigua au pair de los niños, y por primera vez y gracias a sus traducciones he conseguido comunicarme sin complicaciones con Cristal (La nunú). Se ha alargado tanto la conversación que Rocio y yo hemos perdido el autobús para llegar a las clases de Francés... (¿Así empezamos? Lo sé… no tengo remedio…). Por lo que ha sido tarde (Bueno lo que en España sería la hora de la siesta…) de turismo y risas -¡Muchas risas!- e intercambio de opiniones… Algún piti ha caído no voy a mentir.... Después cafecito en un rinconcito escondido de la ciudad (Que por cierto -¡rectifico!- el café aquí riquísimo… ¡solo hay que saber donde tomarlo! (Aviso a navegantes… ¡Los mejores cafés de Grenoble en la segunda cafeteria a la izquierda de la plazita “pequeña” (Como la he bautizado yo) enfrente del Notre-Dame Musée).
Ahhhhhhh Ilusión máxima montarme en el Tram (Tranvía de aquí) -que no vuela como el Metro de Madrid… pero no esta mal…- y conocer… ¡A dos Españoles!. El único problema… que ha sido todo tan rápido que no "me he quedado" con sus nombres… ¿lo último que me han dicho? “Ven este viernes por la tarde a la “Casa de España” ¡Te esperamos!, ¡¡Rue de Londres!!” (¿Qué hago? ¿Voy? No recuerdo ni sus nombres… y a todo esto… ¿Qué es eso de la “Casa de los Españoles”? jajajaja #losespañolesmolamos #miedo #intriga)
En fin, ya sabéis que aquí tienen el llamado “horario europeo”, y a las siete ya estaba en casa ayudando a poner la mesa para cenar (mamá, papá… como veis no pierdo costumbres… jaja).
Si digo que os echo de menos…. ¿Me repito mucho?
Esto fué ayer, Martes 20.
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